¿Es seguro usar papel de aluminio en la cocina?

El papel de aluminio es un producto doméstico común que se usa a menudo para cocinar. Algunos afirman que usar papel de aluminio para cocinar puede hacer que el aluminio se filtre en los alimentos y ponga en riesgo su salud. Sin embargo, otros dicen que es completamente seguro de usar. Este artículo explora los riesgos asociados con el uso de papel de aluminio y determina si es aceptable o no para el uso diario.

¿Qué es el papel de aluminio?
El papel de aluminio, o papel de estaño, es una hoja de aluminio brillante, delgada como el papel. Se fabrica enrollando grandes losas de aluminio hasta que tienen menos de 0.2 mm de espesor y se utiliza industrialmente para una variedad de propósitos, incluidos el embalaje, el aislamiento y el transporte. También está ampliamente disponible en las tiendas de comestibles para uso doméstico. En casa, las personas usan papel de aluminio para almacenar alimentos, para cubrir las superficies para hornear y para envolver alimentos, como carnes, para evitar que pierdan humedad mientras se cocinan. Las personas también pueden usar papel de aluminio para envolver y proteger alimentos más delicados, como verduras, al asarlos. Por último, se puede usar para revestir bandejas de parrilla para mantener las cosas ordenadas y para fregar sartenes o parrillas para eliminar manchas rebeldes y residuos.

RESUMEN:
El papel de aluminio es un metal delgado y versátil que se usa comúnmente en el hogar, particularmente para cocinar. Hay pequeñas cantidades de aluminio en los alimentos. El aluminio es uno de los metales más abundantes en la tierra. En su estado natural, se une a otros elementos como fosfato y sulfato en el suelo, rocas y arcilla. Sin embargo, también se encuentra en pequeñas cantidades en el aire, el agua y los alimentos. De hecho, se encuentra de forma natural en la mayoría de los alimentos, como frutas, verduras, carnes, pescado, cereales y productos lácteos. Algunos alimentos, como las hojas de té, los champiñones, las espinacas y los rábanos, también tienen más probabilidades de absorber y acumular aluminio que otros alimentos. Además, parte del aluminio que consume proviene de aditivos alimentarios procesados, como conservantes, colorantes, antiaglomerantes y espesantes. Tenga en cuenta que los alimentos producidos comercialmente que contienen aditivos alimentarios pueden contener más aluminio que los alimentos cocinados en casa.

La cantidad real de aluminio presente en los alimentos que consume depende en gran medida de los siguientes factores:
Absorción: la rapidez con que un alimento absorbe y se adhiere al aluminio;
Suelo: El contenido de aluminio del suelo en el que se cultivó el alimento;
Envasado: si el alimento ha sido envasado y almacenado en envases de aluminio;
Aditivos: si al alimento se le han agregado ciertos aditivos durante el procesamiento;
El aluminio también se ingiere a través de medicamentos que tienen un alto contenido de aluminio, como los antiácidos.

Independientemente, el contenido de aluminio de los alimentos y los medicamentos no se considera un problema, ya que solo se absorbe una pequeña cantidad del aluminio que ingieres. El resto se pasa por las heces. Además, en personas sanas, el aluminio absorbido se excreta posteriormente en la orina. Generalmente, la pequeña cantidad de aluminio que ingiere diariamente se considera segura.

RESUMEN:
El aluminio se ingiere a través de alimentos, agua y medicamentos. Sin embargo, la mayor parte del aluminio que ingiere se elimina en las heces y la orina y no se considera dañino.